Hábitos que envejecen la piel y te suman años

Entre los hábitos que envejecen la piel se encuentra el estrés y el no dormir lo suficiente

La vida a partir de los 30 ya no es tan sencilla como en la época universitaria: aparecen las primeras arrugas, la memoria empieza a fallar, las resacas se vuelven mucho más duras…Vaya, que la treintena marca un inicio de no retorno a la vejez. Por si fuera poco, existen determinados hábitos que envejecen la piel y que te esfuerzas por cumplir una y otra vez. ¡Basta ya! No podemos luchar contra la genética, pero sí contra todos esos errores del día a día. Todavía estás a tiempo de cuidar tu dermis y que te sigan pidiendo el DNI en las discotecas.

6 hábitos que envejecen la piel y suman años a tu cara

La piel es el órgano que te protege de las reacciones externas, sin embargo, a partir de los 25 el proceso reparador se ralentiza. Ya no es tan efectiva como antes y de ahí que salgan las líneas de expresión (una bonita manera de llamar a las arrugas) o que deje de estar permanentemente tersa y luminosa.

Sabemos que duele y que mirar las fotos de las fiestas que tenías con veinte años es como si te clavasen un puñal que te atraviesa sin contemplación, pero todavía hay cosas que puedes hacer y aquí una muestra de ciertos hábitos que envejecen la piel y que debes evitar.

No dormir lo suficiente

Con tu título debajo del brazo y el primer trabajo aparecen también las prisas, el “no tengo tiempo para nada” y el estrés. Esto provoca que la calidad de tu sueño y las horas que dedicas a dormir empeoren, lo que finalmente se traduce en una piel más apagada, granitos o imperfecciones, ojeras y sí, más arrugas.

Así que, aunque sea solo durante ocho horas al día, olvídate de todo y descansa. Lo mejor para hacerlo es en una habitación completamente a oscuras, bien ventilada y sin nada de ruido. Si tus vecinos no comprenden lo importante que es el sueño, existen tapones para los oídos o incluso audífonos especiales para poder conciliar el sueño.

Olvidarse de limpiar la piel diariamente

Por supuesto, una de las rutinas más favorecedoras para tu cutis son las limpiezas. Esto es algo que hemos tratado más en profundidad en posts como este. A modo de resumen te diremos que debes seguir tres pasos fundamentales:

  • Limpiar tu piel para eliminar impurezas
  • Exfoliar una vez a la semana para remover de forma más profunda las células muertas
  • Hidratar para devolver la piel a su estado original

Gracias a estos cuidados tendrás una piel mucho más suave y controlarás su envejecimiento prematuro.

Además, si te sueles afeitar la cabeza no te olvides de seguir unos pasos determinados para que no te quede la zona llena de granitos o rojeces. En este post te lo contamos todo para lograr el mejor de los apurados.

Ojo con el consumo de alcohol y tabaco

Supongo que ya estarás cansado de escuchar que el consumo de alcohol y tabaco es un factor importante en el envejecimiento de la piel, pues… malas noticias, es verdad.

A ver, no estamos diciendo que no te puedas tomar unas copas en la terraza de tu bar favorito al salir del trabajo, pero como en todo, es necesario la moderación. Si sales de fiesta todos los fines de semana como si no hubiese un mañana tu piel lo notará y sumarás años a tu rostro.

Lo mismo ocurre con el tabaco, porque entre sus efectos nocivos se encuentra la disminución de colágeno, provocando que la piel pierda elasticidad.

Si ya te rondaba la idea de dejar de fumar… ¡adelante! Tu piel, tus pulmones y, en definitiva, tu salud, te lo agradecerán.

No hidratarse lo suficiente

El agua es lo más sano que puedes beber: te ayuda a perder peso, es buena para los riñones, te ayuda a pensar mejor… y aporta vitalidad a tu piel.

Por eso es tan importante hidratarse correctamente, sobre todo cuando haces deporte o cuando realizas actividades al aire libre. Si crees que te estás pasando con los refrescos, reduce su consumo y apuesta por un buen vaso de agua.

Vivir con estrés

El estrés también es uno de los hábitos que envejecen la piel y te suman años. En los casos más graves incluso pueden afectar a tu sistema inmune, de ser así debes acudir inmediatamente a tu médico.

Si te notas estresado (de una forma leve) tenemos que decirte que eso se va a traducir no solo en menos horas de sueño, tal y como comentamos antes, sino que además, la tensión provocada por esto se verá reflejada en tu rostro con más granos, irritaciones cutáneas o en algunos casos, pérdida del cabello (que suele ser temporal).

Lo mejor para intentar paliarlo es conseguir una buena organización en tu día a día, realizar deporte, comer de manera saludable y, por qué no, iniciarse en la meditación.

No protegerse del sol

Este es uno de los puntos que tampoco nos cansamos de repetir, ya que no usar protector solar te convierte en la diana perfecta para las manchas solares, el envejecimiento prematuro y por supuesto, para problemas mucho más serios como el cáncer de piel.

Así que de verdad, usa crema solar y disfruta del sol con moderación.

Evita todos estos hábitos que envejecen la piel y estamos seguros de que conseguirás un aspecto mucho más jovial y una piel tersa y suave que será la envidia de todos.

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